Redacción Opción
En una carta pública dirigida al alcalde de Quito, Santiago Guarderas, los representantes de los maestros de la capital del Ecuador y la provincia de Pichincha plantean salvaguardar la vida de sus pobladores ante el alza de la curva epidemiológica por la COVID 19
La misiva firmada por Jhonny Tamayo, presidente UNE-Quito, Kléver Hidalgo, presidente UNE-Pichincha y Andrés Quishpe, coordinador nacional de UNE, hacen referencia a los señalamientos del burgomaestre: “Por canales oficiales de comunicación, usted ha señalado: “Después de que el COE Nacional informó sobre la nueva situación epidemiológica de Quito, he convocado al COE Metropolitano este lunes, 24 de enero, para tomar decisiones. La salud y bienestar de los quiteños son prioridad para lograr la reactivación económica de la ciudad”.
Al respecto, en la comunicación señalan los siguientes aspectos:
1. Nuestro respaldo a toda resolución que precautele el bienestar de las y los quiteños.
2. En el campo de la educación. Es menester señalar que cuando se indica desde la Autoridad Educativa Nacional el supuesto derecho de madres o padres para decidir el retorno a las aulas, se está falseando todo debate y decisión. Ya que la única elección posible está entre regresar y no regresar. Dejando en segundo plano qué garantías se necesitan y quién es el responsable de darlas, o si es el momento oportuno. Por ahí debería partir una decisión científica y técnica, vinculados al anhelo y necesidad de volver a las aulas y que por su intermedio le presentamos al COE – Cantonal.
3. Datos oficiales del Gobierno sobre la cobertura de vacunación, según grupos de edad, señalan que: los niños y niñas de 5 a 11 años, han recibido la primera dosis el 75.48% y la segunda dosis el 57, 38%; en la población de 12 a 17 años, la primera dosis el 87,09% y segunda dosis el 73,9%.
¿De esos porcentajes cual es la cantidad de la población estudiantil quiteña inmunizada con las dosis necesarias? Junto a esta inquietud, es también necesario tener presente que varios organismos de salud han señalado que, incluso habiendo recibido las dos dosis de la vacuna contra la covid19, se pueden presentar contagios.
A esto se suma que la Organización Mundial de la Salud ha declarado a la variante denominada Ómicron como “variante de preocupación”, puesto que “se transmite con más facilidad, que son más virulentas”. Si el propósito es reabrir las escuelas lo más pronto. Proponemos que de manera urgente las escuelas y colegios en Quito se conviertan en centros de vacunación para completar el proceso en los niños, niñas, adolescentes y jóvenes que aún no se han inmunizado.
4. Varios organismos de salud han solicitado mantener en alerta roja a Quito por el colapso del sistema sanitario en la ciudad. Mientras varias investigaciones señalan que la variante Ómicron sigue siendo predominante en Quito, realidad que es necesario tener presente para precautelar el interés superior del niño y niña en el campo de la educación y salud.
Es verdad que organismos internacionales (UNICEF, UNESCO), señalan la necesidad de reabrir las escuelas. Pero estos organismos también señalan que una de las características del derecho a la educación es la disponibilidad: instituciones y programas con instalaciones seguras, agua potable y en el actual contexto de pandemia insumos de bioseguridad. Materiales que no todos los establecimientos cuentan por lo cual es necesario que el Municipio de Quito, desarrolle un control de los centros educativos y en el caso de no contar con espacios seguros continuar con la educación virtual, hasta que baje la curva de contagio.
5. Demandamos un control objetivo y permanente del aforo del transporte público y municipal.
6. Implementar desde el Cabildo un proceso de testeo gratuito y seguro en los lugares con mayor contagio, acompañado de brigadas móviles en los barrios populares.
Finalizan la carta solicitando al alcalde Guarderas que, “con el propósito de aportar al desarrollo de la ciudad, ser recibidos un grupo de docentes en día y hora que usted lo fije, en aras de aportar con soluciones y estrategias para la defensa de la salud de estudiantes, padres de familia y docentes.