Por Econ. Ana Pilay Tejena*
Suspender el pago de la deuda para salvar vidas y enfrentar la recesion económica
El endeudamiento externo e interno de los países a nivel mundial asciende a USD 253 billones de dólares que equivalen a un 322% del Producto Interno Bruto Global, y según el Instituto de Finanzas Internacionales (IFF) la tendencia del endeudamiento de los países es al crecimiento. Este instrumento de política pública ha sido utilizado por las naciones durante décadas para financiar proyectos sociales y económicos y solventar sus presupuestos; sin embargo para la mayoría de países principalmente los “pobres y menos desarrollados” la deuda pública se ha convertido en una atadura que impide el crecimiento y desarrollo de los pueblos.
Durante décadas los gobiernos se han sometido a presiones y condicionamientos de los prestamistas que van desde:
1) El renunciamiento a una política económica soberana hasta aceptar subordinarse a la legislación de los países prestamistas para acceder a nuevos créditos;
2) Los países prestatarios tienen que crear marcos jurídicos para viabilizar la aplicación de las Cartas de Intención que contemplan: medidas económicas y contrarreformas laborales y sociales, disminución de la inversión en el área social, despido masivo de trabajadores y recortes salariales, eliminación de derechos sindicales y de organización, privatizaciones de áreas estratégicas, salud, educación y seguridad social;
3) Aceptar pagos elevados de amortizaciones, comisiones e intereses, y al momento de no tener presupuesto los gobiernos esta obligados a solicitar nuevos créditos solo para pagar deudas. Esto crea la dependencia económica hacia las potencias mundiales y organismos extranjeros.
En tal virtud, el costo del endeudamiento, los refinanciamientos y reestructuraciones de la deuda pública en los países más pobres del mundo y de América Latina ha sido muy alto, siendo los pueblos los que terminan pagando las deudas adquiridas por los gobernantes. Según la Organización de las Naciones Unidas (2020) la población mundial asciende a 7,700 millones; de los cuales 1,300 millones son pobres y el 84.5% es decir 1,098.50 millones de personas se concentran en el Sur de Asia y en África Subsahariana.
En América Latina hay un total de 620 millones de habitantes de los cuales 185 millones son pobres, y 67.4 millones son extremadamente pobres. Por tanto aproximadamente el 40% de la población en América Latina viven en condiciones de pobreza y extrema pobreza. El endeudamiento de los países ha limitado el desarrollo de los pueblos en sus derechos, en el acceso a educación, salud, seguridad social, empleo, los servicios básicos son deficitarios: agua potable, alcantarillado, energía eléctrica, internet al igual que la obra pública; sin embargo la dependencia económica ha crecido en los países de la región con una deuda pública que se torna interminable. Así mientras los países más pagan a sus acreedores externos e internos, más crece la deuda.
Si bien la deuda pública ha sido un obstáculo para el desarrollo, también lo han sido la corrupción e impunidad presentes en los gobiernos. El panorama económico internacional desde finales del año 2019 e inicios de este año 2020 amenazaba con agravarse en las grandes potencias mundiales principalmente en Estados Unidos y China, debido a conflictos bélicos y la consecuente caída del precio internacional del petróleo. Surge entonces una pandemia que amenaza la vida de la población a nivel mundial y que está afectando todo el sistema capitalista. Han caído las bolsas de valores, los países poderosos como China, Corea, Estados Unidos e Italia han visto caer sus economías. Los países pobres y en vías de desarrollo sienten con mayor magnitud los efectos de la pandemia mundial del Coronavirus.
Cabe mencionar que este virus ha desnudado la fragilidad de los sistemas de salud, mismos que han colapsado al no tener capacidad para asistir a los miles de afectados, evidencia en los países de América Latina la falta de inversión en salud y programas de protección social. Desenmascara el entreguismo de los gobiernos que han priorizado el pago de la deuda a países y organismos multilaterales y han mermado los presupuestos para políticas de desarrollo.
INGRESO PER CÁPITA Y CÁLCULOS DEL BANCO MUNDIAL
Hoy el Coronavirus ha acelerado la crisis y los organismos como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) avizoran una recesión mundial, ante lo cual proponen la “suspensión de los pagos de deuda de los países más pobres para que puedan redirigir fondos a la lucha contra la pandemia del coronavirus. Para considerarse pobre a un país el Banco Mundial ha considerado para el año 2020 un ingreso nacional bruto (INB) per cápita inferior a USD 1,175.00, los países que cumplen con esta condición se encuentran en África, Asia Oriental, Asia Meridional, Europa y Asia Central, Oriente Medio y Norte de África y América Latina y el Caribe.
Cuadro #1
LISTADO DE PASIES MAS POBRES AÑO 2020 ASOCIACION INTERNACIONAL DE FOMENTO GRUPO BANCO MUNDIAL | |||||||
AFRICA | ASIA ORIENTAL | ASIA MERIDIONAL | EUROPA Y ASIA CENTRAL | ORIENTE MEDIO Y NORTE DE AFRICA | AMERICA LATINA Y EL CARIBE | ||
Benin | Guinea | Sierra Leona | Camboya | Afganistan | Kosovo | Djibouti | Dominica |
Burkina Faso | Guinea Bishau | Somalia | Fiji | Bangladesh | Kirguistan | Siria Republica Arabe | San Vicente |
Burundi | Kenya | Sudan del Sur | Kiribati | Bhutan | Moldova | Yemen, Republica | Granada |
Cabo Verde | Lesotho | Sudan | Lao RDP | Maldivas | Tayikistan | Guyana | |
Camerun | Liberia | Tanzania | Islas Marshall | Nepal | Uzbekistan | Haiti | |
Republica Centroafricana | Madagascar | Togo | Micribesia EF | Pakistan | Honduras | ||
Chad | Malawi | Uganda | Mongolia | Nicaragua | |||
Comoras | Mali | Zambia | Myanmar | Santa Lucía | |||
Congo | Mauritania | Zimbabwe | Papua Nueva | ||||
Republica Democratica del Congo | Mozambique | Guinea | |||||
Costa de Marfil | Niger | Samoa | |||||
Eritrea | Nigeria | Islas Salomon | |||||
Etiopia | Rwanda | Timor-Leste | |||||
Gambia | Santo Tome y Principe | Tonga | |||||
Ghana | Senegal | Tavalu | |||||
Vanuatu |
Fuente: Asociación Internacional de Fomento- Grupo Banco Mundial
Elaboración: Ec. Ana Pilay Tejena Mgs. A/P
De acuerdo al grafico #1, en América Latina y el Caribe solo están considerados pobres ocho países: Dominica, San Vicente, Granada, Guyana, Haití, Honduras, Nicaragua, Santa Lucia; estos países tienen un Ingreso per cápita inferior a USD 1,175.00; por tanto y de acuerdo a los análisis fríos y convenientes del Banco Mundial, el resto de países en América Latina incluido Ecuador, inicialmente no podrían acogerse a la suspensión del pago de la deuda. Análisis descabellado que demuestra la naturaleza del Banco Mundial y su política como uno de los chulqueros más grande del mundo; sostenedor del sistema capitalista mundial y por supuesto uno de sus preceptos teóricos es que “el crecimiento económico reduce la pobreza” y para ello utiliza el PIB per cápita como un indicador de “desarrollo económico”, afirmando que si este indicador crece, crece la riqueza y por lo tanto disminuye la pobreza.
A continuación en el cuadro # 2 se encuentra el ingreso per cápita de diecinueve países de América incluido Haití.
PIB (nominal) per cápita. 1
Datos del Fondo Monetario Internacional (2020)
Pos. | País |
PIB (nominal) per cápita 2019 | PIB (nominal) per cápita 2020 |
1 | Uruguay | 17 029 | 17 818 |
2 | Panamá | 16 245 | 17 148 |
3 | Chile | 15 399 | 15 854 |
4 | Costa Rica | 12 014 | 12 690 |
5 | México | 10 118 | 10 405 |
6 | Argentina | 9 887 | 9 730 |
7 | República Dominicana | 8 629 | 9 194 |
8 | Brasil | 8 796 | 8 955 |
9 | Perú | 7 046 | 7 316 |
10 | Colombia | 6 508 | 6 744 |
11 | Ecuador | 6 249 | 6 250 |
12 | Paraguay | 5 692 | 5 904 |
13 | Guatemala | 4 616 | 4 807 |
14 | El Salvador | 4 008 | 4 126 |
15 | Bolivia | 3 670 | 3 870 |
16 | Honduras | 2 548 | 2 593 |
17 | Venezuela | 2 547 | 2 427 |
18 | Nicaragua | 1 919 | 1 869 |
19 | Haití | 784 | 765 |
Total | 7 563 | 7 814 |
Fuente: Fondo Monetario Internacional, ed. (2020)
Para los cálculos del Banco Mundial este indicador refleja que cada persona tiene los mismos ingresos o recursos, lo cual es totalmente falso. Este indicador no refleja los niveles de pobreza y las diferencias abismales en el ingreso entre pobres y ricos. Tal es la situación que la mayoría de países de la región presentan déficit en sus presupuestos anuales y según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) durante el año 2019 el crecimiento regional fue del 0,1% y la previsión de crecimiento para el 2020 es de apenas 1,3%. Este escenario adverso inevitablemente se agrava con la pandemia pudiendo producirse una contracción del Producto Interno Bruto regional (PIB) de -1,8% que podría conducir a un aumento de la tasa de desempleo de hasta un 10%.
En este contexto la mejor salida a la que pueden acudir los países de América Latina incluido Ecuador es declarar soberanamente la suspensión o moratoria indefinida del pago de la deuda externa. Solo así podrán inyectar recursos a sus presupuestos, priorizando la inversión en la salud, y los sectores productivos que generan trabajo como el agrícola, al pequeño y mediano productor; y programas de asistencia y ayuda social para las personas vulnerables.
En el caso de países como Ecuador aparecen en el cuadro # 2 con un ingreso anual per cápita de USD 6 250,00, en razón de tener un Producto Interno Bruto de USD 109.444 millones de dólares, una economía dolarizada, con un mercado de bienes y servicios dolarizados a precios internacionales; pero con sueldos y salarios que se ganan en dólares pero no representan ni cubren la canasta básica que al 2020 supera los USD 716,14 mientras que el salario básico unificado alcanza los USD 400,00. Además los indicadores del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) en el año 2019 señalan que la pobreza alcanza el 25% y la extrema pobreza llega al 8.9%. Es decir que el 33.9% unos 5,864.700 ecuatorianos viven en la pobreza y extrema pobreza. Mientras que en zonas rurales, la pobreza alcanza el 41,8% y la miseria el 18,7%.
Con este indicador y para los cálculos del Banco Mundial, Ecuador no es considerado un país pobre en la región, lo cual es una gran mentira, y paradójicamente este panorama lo abona la actitud servil del gobierno ecuatoriano que en plena pandemia pagó 320 millones de dólares por bonos global como si al Ecuador le sobrara dinero.
QUÉ DEBEN HACER LOS PAÍSES AFECTADOS POR EL CORONAVIRUS?
Frente a la pandemia los gobiernos de la región incluido Ecuador vienen adoptando medidas similares: reducción de impuestos, no cobro de planillas de servicios básicos, créditos para pequeños y medianos productores, refinanciamientos y restructuraciones de deudas con la banca pública y privada, no cobro de intereses y multas por atrasos en pagos, entre otras. Sin embargo estas medidas son paliativas que no alcanzan para la reactivación de las economías. Los países de América Latina tienen altos índices de pobreza y desigualdad, millones viven del trabajo autónomo y se encuentran en la disyuntiva si acatar el aislamiento social o salir a trabajar a un a riesgo de infectarse y poder llevar de comer a sus familias. Por otro lado empresarios inescrupulosos pretenden aprovecharse de la pandemia para exigir a los gobiernos la adopción de contra reformas laborales que posibiliten formas de contracción por horas, sin seguridad social ni beneficios, disminución de sueldos y despidos laborales.
Ante tal circunstancia el llamado del FMI y el Banco Mundial se queda corto, ya que deben llamar a suspender el pago de la deuda no solo de los 76 países considerados pobres sino de todos los países afectados con la pandemia y cuyas economías no podrán cubrir la emergencia y menos financiar la reactivación económica y productiva. Y es importante recalcar la resolución del Parlamento Latinoamericano y Caribeño (PARLATINO) que propone suspender indefinidamente el pago de la deuda de los países de América Latina y El Caribe. Cabe mencionar que el PARLATINO es un organismo intergubernamental de ámbito regional, permanente y unicameral, integrado por los congresos y asambleas legislativas nacionales de Iberoamérica electas democráticamente con sede permanente en Panamá.
En tal virtud existen argumentos suficientes y resoluciones de organismos internacionales que avalan la propuesta de la suspensión o moratoria de la deuda, para ello se requiere impulsar una gran campaña nacional e internacional con las organizaciones sociales y populares, gremios, partidos políticos y demás instituciones y personalidades a fin de lograr que los gobiernos resuelvan de una vez por todas la suspensión de los pagos de deudas.
Para el caso de Ecuador declarar la suspensión o moratoria de la deuda durante el año 2020 supone la inyección de aproximadamente 13 mil millones de dólares, dinero que invertido adecuadamente solventará las necesidades urgentes de salud, educación y producción.
Además se debe articular una política conjunta entre autoridades nacionales y locales, gremios, organizaciones sociales, sindicales, asociaciones, pequeños y medianos productores con el fin de asegurar la alimentación y asistencia humanitaria a las familias que además de perder a sus familiares están contagiados, han perdido sus trabajos o incluso no tienen donde vivir.
No se debe destinar un solo centavo de dólar al pago de la deuda. Primero la vida de los pueblos
*Master en Administración Pública y Desarrollo Institucional