Por Patricio Camacho Z.
PacazaNews
Cuando uno mira las cadenas nacionales del presidente Lasso, donde habla de una situación de prosperidad y las compara con publicaciones económicas de organismos técnicos como Swissinfo.ch y otros, no puede sino adherirse a las voces que exigen su salida, ante una situación tan desastrosa para la mayoría de ecuatorianos.
Veamos algunos indicadores; por ejemplo, el índice de pobreza en Ecuador se situó en diciembre del 2022 en el 25,2 %, algo más de dos puntos porcentuales por debajo del indicador de 2021, que fue del 27% y rozó el nivel del último mes de 2019, antes del inicio de la pandemia, cuando se ubicó en el 25 %; según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC) sobre los indicadores de pobreza y desigualdad al finalizar el 2022, sobre una población que ronda los 18 millones de habitantes.
El INEC consideró que una persona en Ecuador era considerada pobre si percibía un ingreso familiar per cápita menor a 88,72 dólares mensuales, (2,95 dólares diarios) mientras que la extrema pobreza se calculó con un monto de 50 dólares (1,66 dólares diarios).
Así, el índice de pobreza medida por ingresos a final del año pasado se ubicó en el 25,2 %, una cifra, casi igual al 25 % de 2019; menor al 33 % de 2020 y el 27,7 % de 2021. La extrema pobreza en 2022 se situó en 8,2 %, algo menos de dos puntos porcentuales de 2021, cuando fue de 10,5 %, así como de 2020 (15,4 %) y 2019 (8,9 %).
En diciembre pasado, el índice de pobreza por ingresos en el área urbana del país llegó al 17,8% y la extrema al 3,9 %, mientras que en las zonas rurales el indicador de pobreza fue de 41 % y la extrema de 17,4 %.
En cuanto al coeficiente de Gini, que mide el nivel de desigualdad entre la población, en un parámetro en el que cero es una igualdad absoluta y 1 una desigualdad total, Ecuador cerró el año 2022 con un índice de 0,466, inferior a los indicadores de 2019 (0,473), 2020 (0,498) y 2021 (0,474). El coeficiente de Gini en 2022 en el área urbana se ubicó en 0,451, mientras que en la rural fue de 0,433.
La pobreza medida por necesidades básicas insatisfechas, NBI, en diciembre pasado fue de 31,4 % a nivel nacional. El 21,3 % en el área urbana y de 53,3 % en el sector rural, según el INEC. Estos datos hay que analizarlos en el contexto de las reuniones anuales del Banco de Desarrollo Latinoamérica y el Caribe y de la 63 edición de la Reunión Anual de la Asamblea de Gobernadores del BID, en las que han señalado: “La región tiene unos niveles de pobreza inaceptablemente altos y una desigualdad inaceptablemente alta”. El “30% de la población es pobre, 188 millones de personas (..) y 106 millones viven en situación de pobreza extrema”.
Con la pandemia “se revirtieron diez años de progreso” y quedó claro que la región es muy frágil y (..) “frente a un choque, un porcentaje muy alto de la población puede caer nuevamente en pobreza” . Esta es la realidad del Ecuador; lo que nos cuenta el gobierno es un “universo paralelo” en color rosa, pero la realidad es otra, dura y dolorosa, hay que darle un vuelco.