Malos Augurios

Periódico Opción
Periódico Opción
3 Minutos de lectura

Por Ab. Juan Pablo Sansur Ode

Se posesionó como presidente Daniel Noboa, mucha gente lo justificó al mandatario bajo el paraguas de que fue un presidente de “transición” que tan solo duro un año y medio, en un año y medio ya se demuestra una hoja de ruta, ejecutorias.

Somos uno de los países más violentos del mundo, palos de ciego por parte del gobierno nacional en esto, quizá la única hoja de ruta que tiene el gobierno nacional es tener una agenda neoliberal privatizadora, para muestra un botón: Sacha, ahora qué dirán para justificar lo que ya podría avizorarse como un gobierno que fracasaría.

El discurso de posesión por parte del mandatario, en tanto en cuanto no mostró cifras, ni un solo indicador social que haya mejorado, el pueblo que lo eligió y el que no tiene hoy derecho a reclamarle resultados más no ofertas vacuas, fútiles y superfluas: como lo hizo en su discurso, al parecer no aterriza Noboa de que ya es presidente más no candidato.

Sigamos con las expresiones vertidas del mandatario, no venimos a heredar moldes viejos ni a maquillar errores; si en su gobierno la constante ha sido la equivocación, el error, la desidia para no resolver absolutamente nada, dice que no vamos a heredar moldes viejos, si él representa, encarna, significa y simboliza sobre todo un modelo económico oligárquico, recalcitrante, concertador de la riqueza excluyente que responde a una vertiente y corriente neoliberal.

El discurso presidencial de posesión se convirtió en un cúmulo de ofertas electorales como: 200.000 viviendas para cubrir un déficit habitacional, crear una torre oncológica en el Eugenio Espejo, repotenciar un Hospital en la Libertad, hacer el tramo entre Buena Fe y Jujan a cuatro carriles, el gobierno adeuda a las dializadoras 200 millones de dólares, 1000 muertos de lo que dicen hay, adicionalmente podrían ser más, la red vial está descuajeringada, en soletas, el sector de la salud pasa momentos acuciantes: con desabastecimiento de medicamentos también en el IESS, con cirugías represadas, consultas externas relegadas y escasez de médicos especialistas tanto en los hospitales públicos como en el IESS, no hay obra pública.

Es el momento de las definiciones, más no de las elucubraciones y de las especulaciones, el discurso presidencial no fue una rendición de cuentas, frente al telepronter pudo responder el mandatario, no estuvo acartonado, sorprendió quizá, más no convenció, de la economía, del empleo no dijo nada, por lo pronto el presidente debe cambiar de libreto gobernarnos con certezas más no con incertidumbres, la política internacional del gobierno ha sido errática, ideologizada, sesgada, se apela a practicidad, sin embrago no hemos conseguido nada.

Comparte este artículo