Mariano Santos N.
Este 15 de septiembre último se cumplió una gran jornada nacional popular, con la participación de trabajadores, maestros, amas de casa, estudiantes, agricultores (arroceros, bananeros), pequeños y medianos lecheros, etc. que continúan con variados reclamos a Guillermo Lasso, que la podemos catalogar como un fuerte llamado de atención para el presidente. Se oía por doquier: octubre está presente, octubre regresa pronto.
Este 24 de septiembre, Lasso ya cumplió 4 meses en su gestión y tal parece, como dice el tango va cuesta abajo…pues, si bien cumplió con su promesa de vacunación, en el resto de la salud la situación sigue calamitosa, pues como ejemplo no hay medicamentos en ningún hospital público, tampoco en los del IESS.
Lasso ya batió todos los récords, pues desde 1978 en que se regresó a esto que llaman democracia, no ha existido otro presidente que en menos de 3 meses tiene ya a todo un pueblo encima, que le reclama por doquier, con justa razón, en temas muy variados, comenzando con los maestros (que estuvieron 32 días en huelga de hambre), los estudiantes, la educación en general, los trabajadores, los agricultores, lecheros, etc.
Sin embargo, el Gobierno y los grandes medios de comunicación tratan de desprestigiar estas marchas, sacan siempre a la luz los acontecimientos de octubre del 2019, intentan posicionar en el imaginario de la gente que aquello fue obra de vándalos, de delincuentes, que querían destruir Quito, todo a su paso.
Con esas reflexiones tan atrasadas, las importantes gestas independistas que condujeron al 24 de mayo de 1822, para liberarnos de la corona española, habría sido entonces obra de bárbaros y delincuentes, como en realidad los tildaba la realeza española de la época; es decir, Lasso(¿su majestad?, los grandes medios de comunicación y toda la derecha ecuatoriana deberían hoy pertenecer a la realeza y corona española.
Igual reflexión podríamos hacer para la gran gesta del 5 de junio de 1895, ¿bandoleros, delincuentes?, etc., como similarmente los tildaban los sectores terratenientes-conservadores dominantes de la época a los liberales.
Entonces, con esos pensamientos atrasados, Lasso (presidente ilegítimo), como dice nuestro pueblo, no da pie con bola y, entre otras cosas, continúa con su tozudez de seguir incrementando el precio de los combustibles, a sabiendas que eso tiene una gran afectación sobre todo a la gran masa de la población que se debate entre la pobreza y la miseria.
El gobierno, el propio Lasso y los grandes medios de comunicación siguen repitiendo al unísono que los combustibles tienen subsidios; otros, cual verdaderos ignorantes o simplemente por mala fe, replican por doquier que el subsidio viene desde hace 47 años: ¿Quién habrá posicionado semejante tontería?; así, hasta ya se han inventado cifras; algunos hablan de $60.000, otros más audaces señalan $70.000 y más millones, echados al tacho de la basura durante todos estos “47 años”; una ignorancia generalizada y completa o una forma de hacer como en la Alemania nazi: una mentira repetida mil veces se convierte en verdad.
Para determinar en la realidad si hay subsidios o no al precio de los combustibles, es cuestión de revisar cifras, de hacer sumas y restas; el cálculo es muy sencillo: por un lado, en lo positivo, en el Haber, hay que poner lo que se recauda por la producción de los diferentes combustibles en las tres refinerías con que cuenta el país; a esto hay que sumar el valor de las exportaciones que realiza el Ecuador, principalmente del fuel oíl y, por último debe sumarse lo que recauda el fisco como producto de los combustibles importados que se venden en el País.
En el lado negativo, en el Debe, hay que poner la cantidad en dólares de lo que se importa de los combustibles. Haciendo una suma resta de los dos elementos considerados, la resultante es positiva, no hay subsidios; más bien, existe una pequeña utilidad que para el año 2019 estuvo en $152 millones y para el 2020, en $280 millones.
Aquel lector que esté interesado en ver los números, recomendamos leer el artículo «En el Ecuador no existe subsidio a los combustibles»[1], con datos oficiales obtenidos desde las propias páginas de Petroecuador. Pero, para muestra un botón: En Colombia donde no hay subsidios, la gasolina extra cuesta $2,21 el galón, mientras en el Ecuador la misma gasolina, aunque de inferior calidad cuesta 2,39, aunque en ciertas partes, como Pasto, la gasolina puede tener un costo de $2,09 el galón. Otro botón: en algunos estados de EEUU, como Florida, Iowa, Texas, por no citar que unos pocos, la gasolina super (premium en USA), pero de mejor calidad (mayor octanaje), bordea los $3,00 el galón, mientras que acá se la expende a por lo menos $3,35.
Vale sin embargo precisar, que la diferencia en los precios de los diferentes combustibles, no sólo entre varios Estados de EEUU, sino entre varios países, tiene que ver con la mayor o menor cantidad de impuestos que se le irroga al combustible. Al parecer, quieren llevar los precios hasta por encima de los $4 el galón, para que la privatización (otra de las «propuestas» de Lasso) de nuestras tres refinerías sean ATRACTIVAS, muy “RENTABLES” para los «nuevos dueños», a costilla de todos los ecuatorianos y puedan obtener jugosas utilidades.
¡Están jugando ciertamente con fuego!
Entonces, los combustibles no tienen subsidio, no sean mentirosos.
Esta mentira se parece a otra, que igualmente repiten sin cesar: «los bandoleros de octubre fueron los que quemaron La Contraloría”, cuando hoy se sabe que eso no fue así, que el incendio fue un auto atentado, según lo denunció Valentina Zárate, contralora subrogante en su momento, provocado desde adentro mismo, tema que están todavía en fase de investigación.
Pero, no es lo único, prohibido olvidar, la mentira más grandota fue aquella que dijo días posteriores a la primera vuelta electoral cuando se comprometió no sólo ante Yaku Pérez, sino ante el Ecuador entero, de que estaba de acuerdo con la apertura de las urnas en 17 provincias de nuestro país, lo cual reculó en un abrir y cerrar de ojos.
Sin embargo, los engaños no pararon; así, ya posesionado y para obtener una hegemonía en la Asamblea, se reunió en la casa del asambleísta socialcristiano Henry Kronfle en Guayaquil, reunión de la vieja derecha(PSC, CREO)y la nueva derecha (UNES, ahora Revolución Ciudadana); inclusive, Lasso envió su avión particular para que el correísta, Pavel Muñoz, esté presente; a las pocas horas, otra reculada. No se pusieron de acuerdo y Nebot, acusó a Lasso, de no ser serio, de abandonar los acuerdos, de no tener CREDIBILIDAD alguna; ojo, lo dice su propio coideario Nebot.
Ahora, si nos atenemos a sus ofrecimientos de campaña, pues uno era el Lasso de la campaña hasta su posesión, bonachón amigable el del “encuentro”; ahora, luego del 24 de mayo, es otra persona, totalmente diferente, duro, inflexible, ¿admirador de Hitler?; si bien ha cumplido con lo de la vacunación, de la cual saca pecho a diestra y siniestra, la sanidad, los hospitales, siguen siendo un desastre.
Sin embargo, ha engañado a todo el Ecuador, cuando prometió bajar los intereses al 1%, cuando prometió el ingreso libre a la Universidad, el precio de la saca de arroz a $ 35, subir el sueldo mínimo a $500, etc., etc.
Su coideario Nebot, que lo conoce requetebién, decía hace poco, “Salvo la vacunación, no piensan cumplir con nada más”.
Con lo relatado aquí, vale recordar que en el debate, previo a la segunda vuelta, Lasso le sacó un estribillo a Arauz, que ahora, hay que endosárselo a Guillermo: Guillermo: te estás pareciendo a Andrés, mientes cada vez, no mientas otra vez.
Hay sin embargo, otros ofrecimientos, como la subida de la extracción petrolera en un 8%, hasta completar los 526.000 barriles diarios (hasta fines de año); duplicar la extracción petrolera (1 millón de barriles diarios) hasta fines de su mandato, el 2025; o, empleo para 2 millones de ecuatorianos.
¿Otras mentiritas?, el tiempo nos lo dirá. Lo cierto es que, como van las cosas, Lasso estaría transitando por el mismo camino de Bucaram, Mahuad y Gutiérrez…
Notas. –
[1]- En el Ecuador no existe subsidio a los combustibles, ANTEP, 20 septiembre 2021, Periódico Opción