Autor: Juan Carlos Zapata / México
Desde siempre, el imperialismo norteamericano, ha sido gobernado por las clases dominantes, que han impuesto dentro y fuera de sus territorios, el poder oligárquico, desdelos aparatos estatales y organismos internacionales que se crearon para ese fin.
Sin embargo y a pesar de que siempre los gobiernos estadounidenses fueron administradores de los intereses de la oligarquía financiera, nunca antes tantos multimillonarios habían formado parte del aparato estatal directamente como en el próximo periodo de Donald Trump.
Si el senado ratifica a todas las propuestas que Trump está haciendo para formar su gabinete, serán más de 11 multimillonarios que serán parte de su gobierno. Howard Lutnick en Comercio, Linda McMahon en Educación y, Vivek Ramaswamy y Elon Musk en el nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE).
En política exterior también estarán varios magnates como Charles Kushner, será embajador en Francia, Steve Witkoff enviado especial a Medio Oriente y Warren Stephens, como embajador en Reino Unido.
En plena decadencia del imperialismo norteamericano, la oligarquía tomará directamente el timón del su gobierno, intentando salvar al menos sus intereses económicos, porque será irreversible el fin de la era en que Estados Unidos fue la principal potencia mundial.
Adelgazar más el aparato estatal, aumentar aranceles a las importaciones provenientes de las potencias rivales como China, repatriar capitales, disminuir impuestos a las grandes fortunas, son algunos de los planteamientos que sobre la política económica hacen los multimillonarios para el próximo periodo.
Otras acciones contra la clase obrera y los pueblos, que pretende el gobierno de los milmillonarios, es la expulsión masiva de los migrantes, así como amenaza de anexionar parte de Groelandia, retomar el control del canal de Panamá e intervenir militarmente a México.
Volver a recuperar sus zonas de influencia en el continente y someter más abiertamente a los pueblos, así como a la propia clase obrera norteamericana, es el fin de las políticas que Trump pondrá en marcha a partir de este 20 de enero que toma posesión.