Por Msc. Isabel Vargas Torres*
El 01 de septiembre en el régimen Sierra y Amazonía iniciamos el año lectivo 2020 – 2021 y los maestros nos aprestamos nuevamente a entregar todo nuestro contingente a la comunidad educativa. Pero en un contexto diferente; mientras vivimos una pandemia mundial y un régimen abiertamente neoliberal. En las últimas horas, el Ecuador se endeudó nuevamente en USD6.500 millones de dólares. La figura, un préstamo de Servicio Ampliado SAF con el FMI; esto significa más recorte al sector social salud y educación. Para los servidores públicos y maestros representa más despidos y que el atraso en el pago de los sueldos crezca; si hoy lo hacen a los dos meses, el próximo sueldo lo harán cada tres meses.
Regresamos a clases en peores condiciones que cuando iniciamos la emergencia sanitaria, por la situación económica del país destrozada por la política neoliberal del presente régimen. Esto se expresa en más de 300.000 trabajadores despedidos, lo que conlleva a la migración de estudiantes del sector privado al sistema público. Por lo tanto el incremento de matrícula y disminución de docentes aumenta la sobrecarga laboral; mientras reducen nuestro salario. La brecha digital de los niños y jóvenes no ha sido disminuida y aún el 70% no tienen herramientas telemáticas y las ofertas del Ministerio de Educación están supeditadas al Internet. La “educación abierta” es en línea y virtual y para la oferta “estudiando en casa” se requiere además que un padre de familia se quede al cuidado del niño o joven. ¿Cómo hacerlo? si tienen que salir a conseguir el alimento diario y algunos de estos estudiantes han quedado en la orfandad.
Es decir el derecho a la educación hoy se ha convertido en un privilegio; las autoridades han hecho caso omiso del precepto constitucional de «velar por el interés superior del niño y adolescente”.
Esta es la realidad. ¿Qué hacer entonces? Los maestros junto a la UNE hemos enfrentado esta arremetida neoliberal; mientras el gobierno criminaliza la lucha social y golpea la economía popular. Nuestro gremio ha presentado diferentes propuestas para paliar y enfrentar, las políticas que golpean a los más vulnerables. En el campo pedagógico, administrativo, económico, legislativo y jurídico.
Hemos acudido al tan “civilizado” diálogo que es usado para adormecer la lucha social, sin resultados. Tenemos un silencio cómplice por parte de la Corte Constitucional, ante nuestros reclamos. El tiempo nos da la razón, la solución histórica es la lucha en las calles; como lo hicimos en levantamiento popular, indígena y de las organizaciones sociales en octubre rojo. No dejamos que suban la gasolina, pasajes, ni que se ejecute la flexibilización laboral. Hoy nos aprestamos nuevamente a defender la vida; junto a mujeres y hombres; como Yaku Pérez, con él que desde Tundayme en Zamora Chinchipe; recorrimos el país en defensa de la naturaleza, del agua, de la vida de la dignidad de los pueblos de la educación intercultural bilingüe.
Por mejores días para la educación de nuestros niños, jóvenes y del magisterio nos proponemos enfrentar la contienda electoral con un gobierno popular nacido en la minka por la vida, en donde confluyen hombres y mujeres que saben lo que el pueblo necesita para mejorar sus condiciones de vida, hemos construido una propuesta alternativa. Y vamos a vencer¡¡
* Presidenta de la UNE Nacional