Por Jaime Chuchuca Serrano
El discurso de Noboa se ha extraviado de la realidad. Contradictoriamente, el gobierno vende la ilusión de la recuperación con propuestas que actúan contra esta. Por el momento, ante la obligación de cerrar el ITT, se han creado decenas de pretextos por las pérdidas económicas; pero en 8 meses no se ha traspasado la administración del Oleoducto de Crudos Pesados al Estado, lo que significa también pérdidas de cientos de millones de dólares; lo cierto es que el Yasuní seguirá siendo explotado 6 años más. Por otra parte, aunque los funcionarios digan que se ha mejorado el comercio, al contrario, en el primer semestre de este año, las ventas internas han disminuido en 3,2%, una pérdida de 3 134 millones de dólares; los pequeños negocios son los más afectados (-6,1%). La suma de ventas internas y exportaciones ha disminuido 0,75%.
En el segundo trimestre (abril, mayo y junio), las ventas internas cayeron 7% por la subida de impuestos y los combustibles. Esto significa una caída del consumo de hogares (-29%), de la producción y del empleo. Esto se traduce en la caída de los créditos y el incremento de la mora. La crisis del sector energético y la sequía ha golpeado duramente a la economía ecuatoriana: el gobierno compra electricidad cara, así como motores e implementos; basta comparar el alquiler de la barcaza turca karpowership de 100 megavatios, por 180 millones de dólares, con los 400 megavatios por 106 millones, que compra Cuba a la misma empresa. La falta de inversión estatal en la construcción de empresas eléctricas, ha hecho que se dispendien recursos y se ha abierto la puerta para negocios turbios con el sector privado. Ante las pérdidas estatales, ha mejorado la venta de energía privada en un 20%.
La crisis del sector automotriz ecuatoriano, que sabíamos que venía, por la entrada en vigencia del TLC con China, tampoco muestra mejoría en las propias empresas chinas, que reportan una caída de ventas del 20%, a pesar de la disminución de impuestos tras el acuerdo. El sector automotor total, cayó 12% en las ventas de este semestre, una pérdida de 660 millones de dólares. Esta contracción se incrementará con el cierre de la General Motors. La política económica gubernamental, ha creado crisis para el sector público y privado, para las familias trabajadoras, y se han beneficiado unos pocos grupos oligárquicos.