Redacción Opción
La gran presión y movilización popular, la acciones de las organizaciones sociales y políticas de izquierda, impidieron que se consume uno de los mayores atracos a los recursos del país por parte del gobierno de Noboa, que pretendió prácticamente regalar el Campo Sacha, el de mayor producción de petróleo que le contribuye al país con más de 1700 millones de dólares anuales y que tiene 14 mil millones de dólares en reservas probadas. El perjuicio al país iba a ser enorme y desastrosas consecuencias para la economía y el bienestar de la población.
La acción de protección solicitada por la UNE, la solicitud de auditoria urgente demandada por el FUT, las sostenidas denuncias de los dirigentes de ANTEP, la condena de sectores democráticos y patrióticos y la ola de rechazo popular contra Noboa, hizo que el día 11 de marzo el desista de esta corrupta entrega del Campo. Le sirvió como pretexto: que ‘El plazo se venció’ para que la empresa beneficiaria Sinopetrol, pague hasta ese día la prima para firmar el contrato del campo Sacha.
Es una victoria inicial, dijo Andrés Quishpe, presidente de la UNE, porque intentaran de nuevo entregar este campo luego de las elecciones, pro también afirmó que la lección para las organizaciones sociales y el pueblo unido es que puede frenar a entrega de nuestros recursos y defender sus derechos.
José Villavicencio, presidente del FUT, reafirmó que es un triunfo de los trabajadores y los pueblos, de las organizaciones sindicales y sociales. “Lo que mal empieza, mal termina, el gobierno no fue transparente y honesto en este proceso, porque no es posible que ciudadanía se entere de este negociado iniciando un feriado largo de Carnaval”; y añadió que se le ha caído el negocio a la empresa china Sinopetrol y a la familia Noboa, pero los ecuatorianos debemos estar pendientes, porque esto no va a quedar así, porque “la intensión de la burguesía es privatizar, solo que mañana cambiaran de empresas, no será chinas, sino norteamericanas”.
David Almeida, líder de los trabajadores petroleros y los dirigentes de ANTEP señalaron que no pudo avanzar “el mayor atraco petrolero de la historia, por la fuerza de la protesta social”. Ahora “el Gobierno debe deshacer las cosas de la misma forma que las hizo: Derogar resoluciones y acuerdos, debe devolver las torres de perforación y reacondicionamiento a Petroecuador y detener la política de autosabotaje en la empresa que incluye, entre otras cosas, reintegrar a los injustamente despedidos”.
Se refieren a la resolución de adjudicación del 28 de febrero del 2025 y al Acuerdo Ministerial 40 del 25 de noviembre del 2024 y publicado en el Registro Oficial del 23 de diciembre del 2024, en el cual se declaró la “excepcionalidad” de delegar el bloque 60 Sacha a “empresas estatales o subsidiarias de estas” de países de la comunidad internacional, para la exploración y explotación adicional de hidrocarburos. Además, demandan “devolver a Petroecuador el presupuesto de inversión para el campo Sacha que le fue retirado a inicios de año y continuar con el plan de inversiones que ya existía y así elevar la producción del campo. Y el reingreso del personal técnico y administrativo despedido que son más de 28 personas, entre ellos el dirigente David Almeida.