Por Factor D*
Conozco desde hace más de una década al Disfraz, Polo Moposita, quien hace más de 20 años, dirige el grupo cultural Mugre Sur, no solo hace música, siempre tiene una propuesta performática que hace que las letras de sus canciones sean aún más contundentes. Mugre Sur, apoyó la defensa del Yasuní, estuvo en las luchas contra las políticas antipopulares de Correa, Moreno, Lasso y hoy de Noboa, también estuvo en las marchas del 1ro de Mayo y en los dos últimos paros; ahí, en las calles dando la cara y antes de ser Mugre Sur, estuvo en las bullas que tumbaron presidentes en los 90s.
Sus letras son crudas y contestatarias, «chullonas y patasucias» como él mismo las define, es un rap para amantes del Hip Hop y el Hip Hop es en esencia contrasistema, crítico y se ubica del lado del pueblo. No es arte de vitrina porque este es un artista de extracción popular y no es de la elite, de nacidos en cuna de oro que tienen financiamiento privado y argollas para proyectos con el Estado. Es un enorme mérito entonces haber llegado a presentarse en el QuitoFest, que este año contó con 36 bandas musicales y con más de 150.000 espectadores, y que en esa vitrina tan grande, en vez de congraciarse con el poder de turno, lo haya cuestionado con valentía y frotalidad, es de saludar.
Mugre Sur, expresó públicamente lo que la mayoría de la población sentimos pero no podemos decir tan fuerte, o no sabemos cómo, o no tenemos el valor de hacerlo. En una tarima de Quito, el jueves 5 de diciembre de este año, colgaron un muñeco de cartón de esos que Noboa regala en su campaña electoral, eso sí, le taparon la cara para que no se ofenda el caprichoso e inepto señor presidente del Ecuador. Este gobierno se burla del pueblo a diario, con el silencio cómplice de los empresarios y medios de comunicación, pero cuando el pueblo se burla de uno de ellos, saltan encrespados, rabiosos condenan al arte y al artista, hasta hay quienes amenazan con entablar juicios penales y cosas peores.
No faltaron los concejales moralistas que exigen sanciones, los medios de comunicación que iniciaron una campaña que busca el linchamiento mediático, los opinologos de la derecha enfurecidos y el Ministerio de Cultura que condena este acto, condenan la «violencia» y hacen un llamado a la paz.
Tal movilidad y rapidez en sus acciones no se ha visto cuando asesinaron hace poco a un padre de familia que no pudo pagar las vacunas contra su negocio, o frente a los miles de despidos con la excusa de los apagones o contra el alarmante déficit presupuestario de más de 3.000 millones de dólares del presupuesto de educación, mas de 1.000 millones en salud y mas de 100 de las universidades.
El arte tiene por finalidad conmover los sentidos, retratar la realidad, provocar cosas en el espectador; el arte ha sido desde siempre la herramienta de los de abajo para hacer mas pasables las penas y el dolor, para celebrar las victorias y para acompañar las derrotas. Es ingenuo o prepotente pretender que todo el arte y artistas sean ciegos y sumisos ante el poder, más aún frente a un artista que también es pueblo y siente en carne propia la explotación e injusticia. Mugre Sur, nos representa, es un orgullo para el movimiento Hip Hop y el arte popular en general, ¡ojalá hubieran más artistas así
*Miembro del Colectivo Jatari Ñahui y la UNAPE