Por Patricio Camacho z.
Pacaza News
La propuesta de reforma planteada por la comisión “ciudadana” del gobierno de Lasso, no es nada más que una copia actualizada de las visiones neoliberales del Consejo Nacional de Modernización del estado CONAM, en 1994. Allí se proponía el «modelo mixto», que anteriormente, ya los denunciamos; lo centra era separar el fondo de salud y el de pensiones; con ello se blinda el Fondo de Pensiones de los afiliados jóvenes, que, hablando en términos de carnicería, es el «lomo fino”, y se deja el hueso, a cargo del IESS; hasta que muera el último jubilado.
En relación con salud, se aplicará un tarifario, para las atenciones de especialidades y medicinas; es decir, usted tendrá acceso a un paquete básico y sobre este se aplicará un co- pago.
En lo que se refiere a pensiones, se lo hará de la siguiente manera, se deja a los jubilados y afiliados que están próximos a jubilarse, en el “antiguo” sistema, que estarán a cargo del IESS; el cual se le precipita a su inminente quiebra, ya que no se le entrega recursos frescos de los afiliados jóvenes, en vista que estos pasan al manejo privado de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFPs). Además, recurren al aumento de los años de aporte, en vista que subió la expectativa de vida, no así la población aportante. Con ello la trabajadora que cuenta los días para jubilarse, no sabe que a la vuelta de la esquina el Estado se hará cargo del pago de su pensión y solo le cancelará una parte en dinero, que queda en las arcas del IESS ,y el resto en bonos, los que tendrá que ir al mercado negro, para hacerlos efectivos. También se propone la aportación adicional para financiar las décimas pensiones (13ro y 14to). Pero nada de esto resuelve la crisis del fondo de pensiones. ¿Por qué?, al aumentar los años de aportaciones, tal como plantea la comisión, no solo «descarga» el problema del financiamiento del fondo de pensiones en los propios afiliados; ya que ignora el origen de dicho desfinanciamiento, que es el cobro pendiente de la deuda del Estado al IESS, estimada en al menos 60 000 millones de dólares, incluido las Reservas Matemático Actuariales, que no se las hizo a su tiempo y fueron creciendo como una bola de nieve, con el resultado de cifras abismales.
No se menciona nada, sobre las deudas del Estado. El Ministerio de Finanzas le tiene “tonteando” al IESS, y no se ha definido el monto real de la deuda; también, hay que agregar el monto de la deuda por servicios de salud a jubilados y enfermos catastróficos, la deuda por el seguro campesino; por mora privada y el perjuicio del “costo de oportunidad”, que asume el IESS al ser obligado por ley a comprar bonos del Estado. Este año, por ejemplo, se comprarán más de 2.000 millones en bonos. Se prepara un duro golpe contra el IESS y sus afiliados.