Redacción Opción
En la ciudad de Cuenca, el día 19 de octubre de 2024, las organizaciones sociales, sindicales, juveniles, campesinas e indígenas se autoconvocaron para debatir sobre las problemáticas que nos afectan a nivel local, nacional y regional, y proponer alternativas y soluciones y resolvieron realizar la CONTRA CUMBRE DE LOS PUEBLOS EN RESISTENCIA, durante los días 13, 14 y 15 de noviembre, como un espacio para la articulación de la lucha, la reflexión y la construcción de una propuesta para asegurar la justicia y la equidad social y ambiental, pero también para demostrar nuestro rechazo a las políticas neoliberales de empobrecimiento y despojo que imponen los gobiernos de derecha, como el gobierno de Daniel Noboa.
En un comunicado de los la Cumbre señalan: qieren realizar la Cumbre Iberoamericana en un país que le dijo NO a la política extractivista en el año 2023, cuando el 58% de la población decidió dejar bajo tierra el petróleo para proteger el santuario ecológico del Yasuní; no olvidemos la importante votación que tuvo la Consulta Popular en Quito por el Chocó Andino, también realizada en 2023. Además, pretenden realizar su evento de opulencia en una provincia que ganó dos consultas populares para declarar a sus cantones libres de minería metálica: cantón Girón, en el 2019, con el 86% de la población a favor de sus fuentes de agua, y el cantón Cuenca, donde el 80% de la población le dijo NO a la minería metálica en las zonas de recarga hídrica. Estas son tierras de lucha y resistencia, donde la memoria no se pierde entre la propaganda consumista, donde su gente está preparada y organizada para enfrentar a los opresores.
Cuestionan el sistema capitalista y su nefasto modelo neoliberal, expresado en una crisis civilizatoria, amenaza las bases de nuestra sociedad y la vida de nuestro planeta; es una crisis que engloba aspectos sociales, políticos, económicos, culturales y ambientales, y pone en evidencia la nula sostenibilidad del actual modelo explotador y extractivista que ha profundizado la creciente desigualdad social, el aumento de la violencia en todas la áreas, la erosión de valores éticos y la sobreexplotación de los recursos naturales que ha provocado una dramática pérdida de la biodiversidad y la concentración de la riqueza a escala global por parte de las élites económicas.
La Contracumbre de los pueblos es un cuestionamiento al paradigma que ha guiado el supuesto “desarrollo humano” durante siglos, el mismo que será fortalecido y defendido en la XXIX Cumbre Iberoamericana de presidentes y jefes de Gobierno, que se realizará los días 13, 14 y 15 de noviembre en la ciudad de Cuenca, Ecuador.
La reunión resolvió, declararse en Asamblea permanente de pueblos en lucha, impulsar propuestas para superar la crisis en educación, salud, crisis energética, extractivismo y minería, derechos laborales, derechos humanos, derechos de la naturaleza, amenazas a las fuentes de agua y cambio climático, criminalización de la protesta social, militarización y seguridad, entre otros.
Además, construirán el Mandato de los Pueblos en Resistencia como un instrumento de obligatorio cumplimiento para las autoridades nacionales y locales; se rendirá homenaje a la clase obrera, e conmemoración del 15 de noviembre de 1922, Cruces sobre el Agua; la solidaridad con las luchadoras y luchadores sociales que han sido y son perseguidos, criminalizados, desaparecidos y asesinados; así como la solidaridad internacional con los pueblos oprimidos, en especial con el Pueblo de Palestina.
Un momento importante será la realización de movilizaciones populares los días jueves 14 y viernes 15 de noviembre.