Por MSc. André Terán Andrade
La actividad turística es un agente de transformación sociocultural, por lo tanto, desde la toma de decisión de viaje, el entorno del destino, el intercambio de experiencias entre turista y comunidad local, resultan ser impactos que dependen del espacio, tiempo y condición en los cuales se desarrollan, por este motivo las afectaciones no son universales. Las comunidades receptoras tienen contacto permanente de visitantes, lo que las hace susceptibles a cambios socioculturales, las problemáticas que más se marcan son: la conducta moral, el crimen, seguridad, religión, lenguaje y salud. Existe dificultad en medir el impacto social causado por el turismo debido a las limitaciones metodológicas, y problemas en recrear un ambiente antes de la llegada del turista.
Se han realizado evaluaciones desde la percepción de la comunidad local con varios estudios de caso, estos a su vez carecen de perspectiva nacional, regional e internacional, hay que tomar en cuenta que el turista, en el destino cambia sus patrones de consumo, estilo de vida y comportamiento, que ni siquiera aceptaría en su lugar de origen, por lo cual también deben ser analizados. Existen varias estrategias presentadas para medir el impacto sociocultural, por ejemplo: el índice de irritación de Doxey, el ciclo de vida de un destino de Butler; Modelo de Estrategias propuesto por Dogan; Escala de Estrategias de acogida-aislamiento de AP y Crompton, entre otras. Las propuestas ofrecen visiones unidireccionales que asumen un grado de homogeneidad en la comunidad local, algunas reconocen la variedad de respuestas que pueden existir simultáneamente.
Indiscutiblemente el turismo es generador de empleo, directo, indirecto e inducido, en algunos casos se dejan de lado las actividades económicas tradicionales para elegir al turismo, a su vez, algunas sociedades son susceptibles de influencias y se crea el efecto demostración, en su mayoría aceptado por los jóvenes que tratan de imitar a los turistas, problemas sociales como prostitución y delincuencia están asociados al turismo, la salud que en algunos casos rescata las bondades de la naturaleza y en otros es propagadora de enfermedades, el tema de identidad cultural en algunos casos puede ser aprovechado para la valoración de la cultura, en otros se pierde la esencia y significado cultural, seguido de un cambio de pensamiento de la comunidad, sin duda existen beneficios y desventajas de impactos sociales que deben ser analizados profundamente en los diferentes ámbitos de interés colectivo.
Un panorama impensable para el turismo es el que el mundo vive debido a la pandemia del COVID19, según datos de la organización mundial de turismo el 100% de los destinos cuentan con restricciones relacionados a la pandemia, 49% de las fronteras cerradas y 30% suspensión de vuelos de manera parcial y en algunos casos total; hoteles, agencias de viajes, guías de turismo, restaurantes, bares, entre otros relacionados a la actividad, han reducido notablemente su facturación, lo que conlleva perdidas de plazas de empleo y en algunos casos al cierre definitivo de las actividades.
El cambio de comportamiento y hábitos de consumo de los viajeros sin duda serán replanteados, lo cual incita a pensar en un futuro lleno de incertidumbre, donde es imposible no plantear preguntas como: ¿Cuáles son las motivaciones de viaje? ¿Qué ámbitos legales se crearán para garantizar el bienestar de los viajeros y las comunidades receptoras? ¿Cuáles son los protocolos de bioseguridad a seguir?, en fin, un sin número de preguntas que tanto los destinos, viajeros, trabajadores del sector, irán dando respuesta de acuerdo a la nueva demanda.
En la provincia de Imbabura la afectación a la cadena de servicios turísticos es inminente, las empresas dedicadas a la actividad manifiestan que lo único que no se ha detenido son los egresos, se siguen pagando cuentas de alquiler, servicios básicos, seguridad, obligaciones patronales a razón de cero ingresos. Adicionalmente, las empresas intermediarias como agencias de viajes avizoran problemas legales debido a la exigencia de reembolsos, que en algunos casos no dependen del intermediario sino del operador, a pesar que la consigna ha sido “no canceles, viaja mañana” en la práctica se hace imposible, por ejemplo, los viajes programados de fin de año escolar, que para cuando se pueda viajar las prioridades serán otras, hay que sumar que las políticas de aerolíneas y hoteles son distintas, las cuales inciden en diferencias de tarifa, disponibilidad y capacidad de respuesta.
SE ESTUDIAN ALTERNATIVAS DE SOLUCIÓN
Diferentes cantones han formado comités de crisis del sector turístico quienes han tratado de conglomerar a diferentes asociaciones y agrupaciones con la finalidad de generar mesas de trabajo y proponer alternativas de mitigación ante la crisis, sin duda la mediación debe considerarse como un proceso ágil entre entidades públicas y privadas donde se puedan plantear soluciones y construir un acuerdo que las beneficie mutuamente, tal es el caso, que se han presentado alternativas como exceptuar el pago municipal de la Licencia Única Anual de Funcionamiento y del 1×100 sobre activos fijos al Ministerio de Turismo y formular planes de reactivación del sector.
Datos interesantes recabados por la academia determinaron que el 75% del sector hotelero de la provincia no se encuentra en plataformas digitales, para el turista se consideran inexistentes, análisis de la demanda demostró que los visitantes llegan atraídos por la oferta cultural, gastronómica y de aventura buscando experiencias vivenciales, tomando esta referencia se debe considerar como ventaja competitiva la declaratoria a Imbabura como Geoparque Mundial de la UNESCO. Esta nueva realidad obliga a aprovechar las nuevas tecnologías, automatizar procesos y respetar protocolos de distanciamiento en pro de salvaguardar la tranquilidad y seguridad de empleados y clientes.
Estrategias de responsabilidad social empresarial cuentan con un alto valor de aceptación por el cliente, acompañadas de diversas certificaciones que garantizan los servicios ofertados, mantener la comunicación interna, replantear funciones, aprovechar la innovación tomando en cuenta los objetivos de desarrollo sostenible serán la base para la resiliencia del sector.
La siguiente encuesta tiene como finalidad conocer la intención de viaje después de la cuarentena, los datos obtenidos de primera mano permitirán obtener una prospección de la demanda del sector.
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