Por Jaime Chuchuca Serrano
Esta semana, Ecuador con 2016 puntos superó en riesgo país a Argentina con 1984. Esto es una prueba que los organismos internacionales no solo quieren que el país esté subordinado, sino arrodillado. El FMI y su equipo en cada gobierno presionó para el sobreendeudamiento que supera el 65% del PIB. El neoliberalismo (fundamentalismo) no ha resuelto ningún problema económico; y el país tiene la peor inversión extranjera de su historia. Noboa ha dado sus primeros pasos, en el mismo camino que construyeron sus predecesores: tratando de subyugar más al país. La reforma tributaria urgente del presidente, quiere perdonar miles de millones a las corporaciones y aumentar la tributación de la población en 832 millones de dólares.
A pesar de que en la Asamblea se formó la alianza más duradera de los últimos años (RC-PSC-ADN), en el gobierno la unidad de Noboa y Abad no duró ni los minutos de la posesión, lo cual es un síntoma de la fragilidad de un gobierno sin estructura. Aunque Noboa no ha tildado públicamente a Abad como conspiradora a sueldo -como lo hizo en su época Velasco Ibarra- la envió de vacaciones a Tel Aviv, con una fórmula de “embajadora” no existente en la Constitución. Las acciones y comunicaciones del gobierno son exiguas, y su evaluación económica es la de un Estado en quiebra, como diciendo: “no esperen mucho de nosotros”.
A los pocos días, la mayoría asamblearia empezó a plantar sus semillas: posible reparto de los jueces nacionales y la fiscalía, posesión del Contralor Mauricio Torres, perdón de procesos a líderes de la Revolución Ciudadana; de su lado, en la fiscalización, se resolvió la responsabilidad política de peculado de Lasso y se derivó su expediente a la Fiscalía y Contraloría. En agenda, están los juicios políticos para Salazar, Santos y Zapata. Son palpables, los intereses comunes entre el correísmo, los socialcristianos y otras fuerzas por ocupar los puestos de poder. Construye no entró en la mayoría, porque Romo cree que a futuro esta podría perseguirlos, como ellos lo hicieron en su alianza con Moreno. Las deserciones y el desgate de Construye ha sido veloz. Por su parte, hasta mientras, ADN continuará en la dirección que enfoque la mayoría.