Autor: Juan Carlos Zapata
Las medidas contra los trabajadores y migrantes, han provocado inconformidad entre los trabajadores y el pueblo norteamericano.
Esta inconformidad está empezando a transformarse en manifestaciones en las calles, o inclusive en algunos casos aún no se expresa en esta forma, pero tiende a reactivar la movilización.
Una de las primeras inconformidades de los trabajadores norteamericanos ante el plan de despido masivo de trabajadores del gobierno federal en Estados Unidos se expresó en la afiliación masiva de más de 8 mil nuevos trabajadores a la Federación de Trabajadores Federales de Estados Unidos (AFGE, por sus siglas en inglés) creciendo este sindicato a 321 mil trabajadores afiliados.

Este sindicato ha amenazado con la huelga, a pesar de que este derecho no esté contemplado en las leyes norteamericanas, con esta amenaza a huelga se contiene un tanto los despidos, pero el peligro de que miles de trabajadores se queden sin trabajo, aún permanece.
La deportación masiva de trabajadores migrantes por el Gobierno norteamericano es otro de los temas que está movilizando principalmente a los trabajadores latinos, que hicieron una demostración de fuerza en las calles de Estados Unidos el día 3 de febrero.
Podemos considerar que esta fue la primera movilización masiva durante el gobierno de Trump; esta manifestación contra la política antimigrante de Trump se expresó en todo el país, sin embargo, en los estados donde hay mayor población latina, como es el caso de California, en donde prácticamente en todas las ciudades registró acciones en calles de ese estado.
Las inconformidades contra las medidas de Trump, están encontrando respuesta de los trabajadores en las calles, esta tendencia tiende a crecer al interior de Estados Unidos, si esta tendencia se concreta, también jalonará a los trabajadores y los pueblos del mundo.