PCMLE, 60 años de lucha por el poder popular y el socialismo!

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Por Patricio Aldaz*

La necesidad de superar la sociedad capitalista, sistema causante de todas las calamidades que sufre la humanidad, tiene la urgencia de las múltiples manifestaciones de inconformidad, de rechazo a las medidas, arbitrariedades y atropellos de la clase dominante en el poder, en el repudio a las imposiciones de los organismos internacionales y a las guerras y genocidio imperialista.

Sin embargo, siempre surge una interrogante: ¿por qué siendo tantos los problemas no resueltos y permanentemente agudizados en el capitalismo, no se produce la revolución?

Es obligatorio discernir esta inquietud.   

La revolución social del proletariado se diferencia de todas las revoluciones anteriores, en que no reemplaza una clase explotadora por otra, sino que termina con todo sistema de explotación.  

Éste constituye el más grande paso histórico de la humanidad, será un formidable salto en beneficio de la sociedad, de su emancipación. Pero, al mismo tiempo, la más grande afectación a los intereses y privilegios de la clase explotadora más poderosa y depredadora de la humanidad.

Esta clase, la clase de los capitalistas, de los imperialistas despliegan toda su experiencia y su poder para tratar de frenar la historia, de evitar la revolución socialista, de impedir su extinción. Mas, sabemos que eso es inevitable.

Para defender su sistema despliegan todo su arsenal político, perfeccionan las herramientas de dominio y control ideológico con el fin de neutralizar las amenazas al orden establecido.

Exaltan el espejismo de la libertad (su libertad), de la democracia (su democracia), presentándolas como causas supremas, e inquebrantables.

Extreman las distorsiones de la naturaleza de la nueva sociedad, para sembrar dudas y temores en las masas trabajadoras respecto de la necesidad de conquistar la sociedad socialista.

Más, su acción dificulta pero no impedirá que la revolución ponga fin a su sistema.

Sin embargo, esa realidad confirma que, para que la revolución se produzca es imprescindible el Partido de vanguardia, el Partido Marxista Leninista.

Esa comprensión la tuvieron los fundadores del Partido Comunista Marxista Leninista del Ecuador, 60 años atrás.

Esa comprensión la tenemos los militantes actuales de nuestro PCMLE.

Esa comprensión es la que asumieron los camaradas que impulsaron las tareas de la construcción de este Partido, a lo cual le entregaron sus mejores esfuerzos.

Son 60 años en que el Partido ha estado inmerso en la lucha de clases en la sociedad ecuatoriana, impulsando, alentando o apoyando todas las batallas de los trabajadores, de los campesinos, de los pueblos indígenas, de los estudiantes y la juventud, de las mujeres y de los artistas populares, de los pobladores y de los profesionales, de los pequeños productores, por sus derechos y sus demandas.

Hemos trabajado por estimular la organización sindical, social y política de los trabajadores y los pueblos del Ecuador, organizaciones guiadas por principios clasistas, democráticos y revolucionarios, que sean referentes para el conjunto del movimiento popular.

Nuestro Partido se ha esforzado por apoyar la formación de cuadros políticos revolucionarios, que han asumido roles trascendentes en la sociedad ecuatoriana.

La inserción en la lucha de clases, la necesidad de elevar la conciencia y lucha política por parte de las masas trabajadoras, de la juventud, coincidiendo y en conjunto con sectores patrióticos y de izquierda, dio impulso la constitución de una organización política de izquierda, que enfrente las batallas políticas y electorales en el espacio de la legalidad burguesa. Surgió así el Movimiento Popular Democrático, que cumplió un extraordinario papel en el impulso de la lucha política y destacó figuras de extraordinario renombre como Jaime Hurtado Gonzáles, cuya condición de dirigente del PCMLE y su compromiso revolucionario, le llevó a entregar todas sus formidables capacidades a la causa emancipadora de la clase obrera y los pueblos del Ecuador, conquistando la admiración y el cariño de su pueblo y el odio enfermizo de la burguesía, radicalizado al extremo de maquinar su vil asesinato.

No fue el primero, ni el último comunista marxista leninista víctima de la saña asesina de la burguesía. Buscando contener el impulso revolucionario e intimidar a los combatientes populares, los aparatos represivos del Estado de la burguesía, asesinó en las mazmorras de la capital, al formidable dirigente de la FEUE Milton Reyes, al igual que lo hicieron con la maestra Rosita Paredes, el combatiente juvenil Jorge Tinoco, el zapatero líder popular Miguel Pozo, la combatiente indígena Zoila Martínez, el Campesino Klever Alvarado, el dirigente obrero David Guevara, destacados y valiosos militantes marxista leninistas.  

También entregaron sus extraordinarias capacidades, grandes militantes y dirigentes comunistas como Washington Álvarez (el Joche), Rafael Larrea (nuestro querido poeta), Carlos Alvarado (el Coquín), Carlos Tapia, Paulino Nazareno, Marco Auquilla, y muchos otros camaradas que nos arrebataron crueles enfermedades.

Son ellos los héroes del Partido y el pueblo, son valiosos y permanentes referentes de nuestro Partido.

Sus ejemplos de sagacidad y agudeza política, de perseverancia hasta la coronación de los objetivos, han aportado, en estos 60 años de vida y lucha revolucionaria, a la construcción de este Partido, a forjar esa voluntad de acero que caracteriza a los militantes marxista leninistas, a extender su organización a toda la geografía nacional, a echar raíces crecientes en la clase obrera y la juventud, en el campesinado y los maestros, en importantes sectores poblacionales y profesionales.

La constitución de la juventud Revolucionaria del Ecuador 40 años atrás, significó un trascendente paso en la responsabilidad de organizar y hacer la revolución. Tenemos la convicción que sin la incorporación de la juventud, no será posible el éxito de la revolución en el Ecuador.  

La experiencia de 60 años de vida del PCMLE, de hacer camino al andar, nos han planteado el desafío de trabajar por acumular fuerzas revolucionarias, que las hemos entendido como el impulso a la constitución de organizaciones sindicales, sociales y populares conducidas por principios clasistas y revolucionarios que, insertadas en el conjunto del movimiento, promuevan la unidad y alienten la lucha más amplia de la clase obrera, la juventud y las demás clases trabajadoras.  

En el enfrentamiento al poder de la burguesía, hemos entendido que la opción revolucionaria debe desenvolverse cotidianamente, que nuestra estrategia es permanente pero la táctica es flexible y debe responder, desde las posiciones de clase, a las realidades cambiantes y los desafíos que nos presenta la dinámica del ejercicio del poder burgués. Hacer política revolucionaria en la coyuntura, es tarea revolucionaria.  

Hemos enfrentado todo tipo de gobiernos de la burguesía, dictaduras militares y civiles, gobiernos derechistas, centristas y socialdemócratas, y todos ellos arreciaron contra el Partido del Proletariado, buscaron golpearlo y aniquilarlo.

Particular saña desplegó el régimen de Rafael Correa: ordenó la Ilegalización del MPD, secuestró el Fondo de Cesantía del Magisterio Ecuatoriano, se apoderó de esta sede de la UNE, en que realizamos este acto, y persiguió y encarceló a muchos miembros y dirigentes del Partido, así como a cientos de dirigentes y luchadores populares. Y lo hizo a nombre de una supuesta izquierda, de la denominada “revolución ciudadana”, desnudando la verdadera naturaleza contrarrevolucionaria del progresismo.

Mas, el MPD resurgió en nuestra vigorosa Unidad Popular, la UNE recuperó su legalidad y el perseguidor actúa desde fuera del país porque no quiere responder por los evidentes hechos de corrupción de su régimen.

Una vez más se ha evidenciado que el marxismo leninismo es invencible, que el partido del proletariado que se guía por esta teoría, es indestructible.

Compañeras y compañeros:

En el curso de estos años de vida del Partido, hemos afirmado la convicción de que no hay acción revolucionaria en el país si no se asume también las tareas y responsabilidades internacionalistas. Hemos procurado cumplirlas a cabalidad. Nos cupo en honor de haber sido anfitriones de las reuniones de constitución de la Conferencia Internacional de Partidos y Organizaciones Marxista Leninistas CIPOML, hace 30 años.

En esta oportunidad queremos agradecer a los compañeros de las delegaciones internacionales que participaron en el 28 Seminario Internacional Problemas de la Revolución en América Latina, que culminó exitoso, por la responsabilidad y el aporte de todos los participantes. Su presencia en este acto es un gran estímulo para nuestra lucha.

A propósito de esta celebración del 60 aniversario, queremos darles la bienvenida a todas y todos los camaradas que han ingresado a las filas del PCMLE en la promoción 60 Aniversario, y a los que aún no lo han hecho les invitamos a sumarse a nuestra organización y entregar lo mejor de nuestras capacidades a la más grande y noble causa, la emancipación de la humanidad de las cadenas de la explotación capitalista.

Nuevas y grandes tareas y desafíos se presentan para los comunistas marxista leninistas. Se vienen importantes batallas políticas y sociales, en las cuales, una ves más, los comunistas marxista-leninistas, estaremos en primera fila.

¡Viva el 60 aniversario del PCXMLE!

¡Viva el internacionalismo proletario!  

¡Viva el marxismo leninismo!

*Patricio Aldaz, Vocero nacional del Partido Comunista Marxista Leninista del Ecuador. Discurso pronunciado en el acto de celebración de los 60 años, el día sábado 3 de agosto de 2024

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