Por Prof. Stalin Vargas M.*
Los trabajadores, la juventud y los pueblos del Ecuador somos solidarios, la historia del país tiene evidencias concretas de que este valor es una práctica permanente, recordemos lo del terremoto en Manabí y Esmeraldas, la solidaridad del pueblo se hizo presente.
Hoy, en la lucha contra la pandemia del coronavirus, el trabajo diario del personal de salud, los trabajadores de limpieza, de los servicios básicos y áreas estratégicas, de la industria alimentaria y agropecuaria, la labor de los docentes con sus estudiantes a través de las plataformas institucionales y el wasap, el teletrabajo que realizan empleados públicos, bancarios y trabajadores, muestra cómo la solidaridad está presente.
Mientras esto ocurre, los neoliberales están pensando qué hacer para que el peso de la crisis sanitaria recaiga sobre los hombros de los trabajadores públicos y privados. Hoy mismo el economista Augusto de la Torre, ex Presidente del Banco Central del Ecuador en el gobierno de Sixto Durán Ballén, propone al gobierno que ¨nuestra única salvación es redistribuir solidariamente recursos a los más necesitados a través de que el Estado baje el gasto en sueldos unos 1 000 o 2 0000 millones de dólares que se destinan al sector público… crear un fondo de Redistribución Solidaria, que tenga una supervisión privada, con gente notable… un impuesto progresivo a las personas y no a las empresas, esto nos daría autoridad moral para decirle al FMI ahora sí, ayúdanos¨.
El gobierno dice que es el momento de ayudar, ¨los que más tienen a los que menos tienen¨, esta expresión debe tener coherencia en la realidad, a los 270 grupos económicos del país, les debe exigir que sean solidarios en los hechos, por ejemplo:
El 10 de marzo de este año, el Servicio de Rentas Internas, publicó el Ranking de Deudas, 500 empresas le deben al Estado 1 499 millones de dólares, son deudas en firme por lo que están habilitadas para poder cobrarlas. Allí están recursos económicos para financiar las necesidades de la salud.
Las 10 empresas que obtuvieron ingresos por más de 10 382 millones de dólares en el año 2 019 (Supermaxi, Claro, Pronaca, Mi Comisariato, Chevrolet, Dinadec S.A., Difare, Tía, Movistar y Primax), contribuyan para que los kits alimentarios lleguen a 1 500 000 jefas y jefes de hogares pobres, con lo cual se estaría alimentando a 6 millones de ecuatorianos y ecuatorianas.
Los banqueros que tienen tuvieron utilidades por 616 millones de dólares en el año 2 019 y que durante los 10 años del correísmo tuvieron ganancias extraordinarias, contribuyan para financiar la crisis sanitaria y no piensen solo en tener ganancias a cómo de lugar.
Declarar la moratoria de la deuda externa, es otra de las medidas que el gobierno debe tomar, la vida por sobre los chulqueros es la consigna a seguir. Hasta el Grupo del Banco Mundial, a través de su presidente David Malpass dice: ¨Exhorto a los líderes del G-20 permitir que los países más pobres suspendan todos los reembolsos de créditos bilaterales oficiales¨.
Presidente Moreno, los trabajadores, la juventud y los pueblos del Ecuador somos solidarios, pero no podemos pagar la crisis, los grandes grupos económicos que tienen ganancias extraordinarias deben contribuir a financiar la actual situación.
*EX PRESIDENTE UNE NACIONAL
Quito, 25 de marzo de 2 020